La endometriosis consiste en la aparición y crecimiento de tejido endometrial fuera del útero, sobre todo en la cavidad pélvica como en los ovarios, detrás del útero, en los ligamentos uterinos, en la vejiga urinaria o en el intestino. Es menos frecuente que la endometriosis aparezca fuera del abdomen como en los pulmones o en otras partes del cuerpo.
La endometriosis es una enfermedad relativamente frecuente, que puede afectar a cualquier mujer en edad fértil, desde la menarquía hasta la menopausia, aunque algunas veces, la endometriosis puede durar hasta después de la menopausia. La endometriosis altera la calidad de vida de las mujeres que la padecen, afectando a sus relaciones de pareja, familiares, laborales y de reproducción.
Causas
Cada mes, los ovarios de una mujer producen hormonas que estimulan a las células del revestimiento uterino (endometrio) a multiplicarse y prepararse para un óvulo fecundado. El revestimiento se inflama y se vuelve más grueso.
Si estas células, llamadas células endometriales, crecen por fuera del útero, se presenta la endometriosis. A diferencia de las células que se encuentran normalmente en el útero y que se desprenden durante la menstruación, las que se encuentran por fuera del útero permanecen en su lugar. Algunas veces, sangran un poco, pero se curan y vuelven a ser estimuladas de nuevo durante el siguiente ciclo.
Este proceso continuo lleva a síntomas de endometriosis (dolor) y puede causar cicatrices (Adherencias) en las trompas, los ovarios y las estructuras circundantes en la pelvis.
La causa de la endometriosis se desconoce, pero hay muchas teorías. Una teoría sugiere que las células endometriales que se desprenden durante la menstruación pueden «devolverse» a través de las trompas de Falopio hacia la pelvis. Una vez allí, se implantan o se multiplican en las cavidades abdominales o pélvicas. Esto se denomina menstruación retrógrada.
Esto sucede en muchas mujeres, pero puede haber algo acerca del sistema inmunitario en mujeres que desarrollan endometriosis en comparación con aquellas que no padecen esta afección.
La endometriosis es un problema común y, algunas veces, puede ser hereditaria. Aunque típicamente suele diagnosticarse entre los 25 y 35 años, la afección probablemente comienza alrededor del momento del inicio de la menstruación regular. Una mujer que tenga una madre o hermana con endometriosis tiene seis veces más probabilidad de desarrollar esta enfermedad que las mujeres en la población general.
Otros posibles factores de riesgo comprenden:
- Comienzo de la menstruación a una edad temprana
- Nunca haber tenido hijos
- Ciclos menstruales frecuentes
- Períodos que duran 7 días o más
- Problemas como un himen cerrado, que bloquea el flujo de sangre menstrual durante el período.
Síntomas
El dolor es el principal síntoma para las mujeres con endometriosis y puede incluir:
- Períodos dolorosos
- Dolor abdominal bajo o calambres pélvicos que pueden sentirse durante una o dos semanas antes de la menstruación
- Dolor abdominal bajo que se siente durante la menstruación (el dolor y los calambres pueden ser permanentes y sordos o muy intensos)
- Dolor durante o después de la relación sexual
- Dolor con las deposiciones
- Dolor pélvico o lumbago que puede presentarse en cualquier momento durante el ciclo menstrual.
Nota: con frecuencia, no hay ningún síntoma. De hecho, algunas mujeres con casos graves de endometriosis no sienten absolutamente ningún dolor, mientras que algunas con endometriosis leve presentan dolor intenso.
Pruebas y exámenes
Los exámenes que se hacen para diagnosticar la endometriosis abarcan:
- Examen pélvico
- Ecografía transvaginal
- Laparoscopia pélvica
Tratamiento
Las opciones de tratamiento abarcan:
- Medicamentos para controlar el dolor
- Medicamentos para impedir el empeoramiento de la endometriosis
- Cirugía para eliminar las áreas de endometriosis
- Histerectomía con extirpación de ambos ovarios
El tratamiento depende de los siguientes factores:
- Edad
- Gravedad de los síntomas
- Gravedad de la enfermedad
- Si se desean o no hijos en el futuro
Algunas mujeres que no desean tener hijos en el futuro, tienen la enfermedad y síntomas leves, pueden optar por simplemente hacerse exámenes regulares cada 6 a 12 meses, de manera que el médico pueda constatar que la enfermedad no está empeorando.
Las mujeres que padecen endometriosis pueden controlar los síntomas usando:
- Ejercicio y técnicas de relajación
- Antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como ibuprofeno, naproxeno, paracetamol o analgésicos recetados para aliviar los cólicos y el dolor.
El tratamiento puede implicar suspender el ciclo menstrual y crear un estado parecido al embarazo, llamado seudoembarazo, lo cual puede ayudar a prevenir el empeoramiento de la enfermedad. Esto se hace empleando anticonceptivos orales que contengan estrógenos y progesterona.
- Si se toma el medicamento continuamente durante 6 a 9 meses antes de suspenderlo durante una semana para tener el período. Los efectos secundarios comprenden el manchado con sangre, sensibilidad mamaria, náuseas y otros efectos hormonales secundarios.
- Este tipo de terapia alivia la mayoría de los síntomas de endometriosis, pero no impide la cicatrización a causa de la enfermedad. Tampoco neutraliza ningún cambio físico que ya haya ocurrido.
Otro tratamiento consiste en el uso de progesterona en pastillas o inyecciones. Los efectos secundarios pueden ser molestos y abarcan depresión, aumento de peso y manchas de sangre.
A algunas mujeres se les pueden prescribir medicamentos para impedir que los ovarios produzcan estrógeno.
Estos medicamentos se llaman agonistas de la gonadotropina.
- Los efectos secundarios potenciales comprenden síntomas de menopausia como sofocos, sequedad vaginal, cambios en el estado de ánimo y pérdida precoz de calcio de los huesos.
- Debido a la pérdida de la densidad ósea, este tipo de tratamiento por lo general se limita a seis meses. En algunos casos, se puede extender hasta por un año si se administran lentamente pequeñas dosis de estrógeno y progesterona para reducir los efectos secundarios del debilitamiento de los huesos.
La cirugía es una opción para las mujeres que presenten un dolor severo que no mejora con tratamiento hormonal o que deseen quedarse embarazadas, ya sea ahora o en el futuro.
- La laparotomía o laparoscopia pélvica, se hace para diagnosticar la endometriosis y posteriormente extirpar o destruir todo el tejido relacionado con la endometriosis y el tejido cicatricial (adherencias).
- Las mujeres con enfermedad o síntomas severos que no desean tener hijos en el futuro pueden someterse a una cirugía para extirparles el útero (histerectomía). También se pueden extirpar uno o ambos ovarios y las trompas de Falopio. Una de cada tres mujeres que no se hacen extirpar ambos ovarios en el momento de la histerectomía experimentarán síntomas nuevamente y tendrán que someterse a una cirugía posterior para que se los extirpen.
Pronóstico
La hormonoterapia y la laparoscopia pélvica no pueden curar la endometriosis; sin embargo, pueden aliviar parcial o totalmente los síntomas en muchas pacientes durante muchos años.
El hecho de extirpar el útero (histerectomía), ambos ovarios y las trompas de Falopio brinda la mejor probabilidad de cura para la endometriosis. Usted puede necesitar hormonoterapia después de que le extirpen los ovarios. En muy pocas ocasiones, la endometriosis puede reaparecer, incluso después de una histerectomía.
La endometriosis puede producir infertilidad, pero no en todas las pacientes, y sobre todo si ésta es leve. La cirugía laparoscopia puede ayudar a mejorar la fertilidad. La probabilidad de éxito depende de la gravedad de la endometriosis. Si la primera cirugía no le ayuda a quedarse embarazada, es improbable que sirva repetir la laparoscopia. Las pacientes deben considerar la posibilidad de tratamientos adicionales para la infertilidad.
Posibles complicaciones
La endometriosis puede llevar a problemas para quedarse embarazada (infertilidad). Otras complicaciones que pueden abarcan son:
- Dolor pélvico crónico o prolongado que interfiere con las actividades sociales y laborales
- Quistes grandes en la pelvis (llamados endometriomas) que pueden romperse (ruptura)
Otras complicaciones son poco comunes. En unos pocos casos, los implantes de endometriosis pueden causar obstrucción de los tractos gastrointestinal o urinario.
En muy raras ocasiones, puede desarrollarse cáncer en las áreas de endometriosis después de la menopausia.
Recuerde que es importante que consulte a su ginecólogo si:
- Tiene síntomas de endometriosis
- El dolor de espalda u otros síntomas vuelven a aparecer después del tratamiento de la endometriosis
Piense en la posibilidad de hacerse pruebas de detección para endometriosis si a algún familiar cercano (madre, hermana,..) haya sido diagnosticado de esta enfermedad o si no puede quedarse embarazada después de intentarlo durante un año.
Si deseas conocer más sobre esta patología pregúntale a nuestros ginecólogos en consulta.